Desde tiempos antiguos, las personas han valorado las gemas por su belleza y rareza, y las han convertido en símbolos de riqueza y estatus. Se han utilizado en joyería y como moneda de cambio en todo el mundo..
Los antiguos egipcios fueron los primeros en valorar y utilizar las piedras preciosas en joyería, y las consideraban símbolos de poder y estatus. Especialmente apreciadas eran la turquesa, el lapislázuli y la amatista, que se empleaban en la confección de collares, brazaletes y aretes. Los egipcios también creían que ciertas piedras tenían propiedades mágicas y curativas, y las utilizaban en amuletos y talismanes.
Asimismo, en la Grecia antigua se daba gran importancia a las gemas y se utilizaban en joyería. Especialmente sobresalían la esmeralda, el zafiro y el rubí, los cuales se caracterizaban por sus propiedades curativas y protectoras reconocidas de forma extendida.. Los griegos también creían que ciertas piedras tenían propiedades mágicas y divinas, y las utilizaban en sus ceremonias religiosas y rituales.
Durante la Edad Media, las piedras preciosas se utilizaron en joyería tanto en Europa como en Asia. En Europa, la nobleza y realeza llevaban joyas con diamantes, rubíes, esmeraldas y zafiros, considerados protectores y curativos. En China, se valoraba mucho el jade por sus propiedades curativas y protectoras, y se utilizaba para fabricar amuletos y talismanes en Asia..
Durante el Renacimiento, las gemas se apreciaban sobre todo por su singularidad y hermosura. Los joyeros antiguos crearon arte con diamantes, esmeraldas, rubíes y zafiros en joyas detalladas y elaboradas. También se descubrieron nuevas fuentes de piedras preciosas en América del Sur, y se comenzaron a utilizar en joyería en Europa.
En el siglo XVIII, la popularidad de las piedras preciosas en joyería alcanzó su punto máximo. Los diamantes se valoraban por su brillo y durabilidad, convirtiéndose en la piedra preciosa más demandada en la joyería. Durante esta época, se crearon algunas de las joyas más famosas y elaboradas de la historia, incluyendo el diamante Hope y el diamante Regente.
En el siglo XIX, se hallaron piedras preciosas en África y América del Sur, usándose en joyería globalmente. Los diamantes se convirtieron en la piedra preciosa más popular, y la industria del diamante creció rápidamente. También se comenzaron a utilizar piedras preciosas de colores en joyería, incluyendo el zafiro, la esmeralda y el rubí.
En el siglo XX, la joyería continuó utilizando piedras preciosas, pero hubo cambios en su extracción y comercio. En 1919, De Beers Consolidated Mines Ltd. se convirtió en el mayor productor y controlador del comercio mundial de diamantes.
Sin embargo, también surgieron preocupaciones sobre los derechos humanos y la explotación en la industria de las piedras preciosas. Durante la década de 1990, se estableció el Proceso de Kimberley con el objetivo de prevenir la comercialización de diamantes procedentes de zonas de conflicto.
Mediante la implementación de un sistema de certificación que garantiza su origen ético y transparente, contribuyendo así a mejorar la reputación de la industria diamantífera.
Los diamantes siguen siendo la piedra preciosa más popular, pero también hay una creciente demanda de piedras de colores, como los zafiros, esmeraldas y rubíes.
Aunque existen preocupaciones éticas y de sostenibilidad, la demanda de las gemas sigue siendo alta debido a que se consideran una inversión y un símbolo de refinamiento.
AÑO DE SU DESCUBRIEMIENTO
Es difícil precisar el año del descubrimiento de las primeras piedras preciosas, dado que esto ocurrió hace milenios, antes de la existencia de registros escritos. Sin embargo, se sabe que desde la antigüedad, las personas han valorado las piedras preciosas por su belleza, rareza y propiedades curativas y protectoras.
El lapislázuli, una piedra azul profunda, se ha utilizado en joyería y decoración por más de 6,000 años en Mesopotamia, Egipto, Grecia, India y China.
Otra piedra preciosa que se utilizó desde la antigüedad fue el ámbar, una resina fosilizada que se encuentra en todo el mundo. El ámbar se utilizó como joya en la antigua Grecia y Roma, y también se utilizó en la medicina tradicional para tratar enfermedades y dolencias.
El jade se ha utilizado por más de 7,000 años en joyería y objetos rituales en China y Mesoamérica por su belleza y virtudes curativas. Desde hace siglos, se ha usado coral, turquesa, zafiro y rubí para decorar, convirtiéndose en gemas populares a nivel mundial.
TIPOS DE PIEDRAS PRECIOSAS
Existen muchas piedras preciosas diferentes, cada una con sus propias características, historia y significado. En esta respuesta, describiré algunas de las piedras preciosas más conocidas desde una perspectiva histórica y gemológica.
Diamante: El diamante es la piedra preciosa más famosa y valiosa. Es una forma cristalina de carbono y se forma a profundidades extremas en la Tierra.
Desde la época romana, los diamantes han sido apreciados por su dureza, brillo y belleza, y se han utilizado en la joyería como símbolos de amor durante siglos.
Los diamantes también se han utilizado en la industria debido a su dureza y capacidad para cortar y pulir otros materiales.
Rubí: El rubí es una variedad de corindón rojo, y es una de las piedras preciosas más valiosas después del diamante.
Los rubíes se han valorado desde la antigüedad por su belleza y color rojo intenso, y se han utilizado en la joyería y la decoración durante siglos en todo el mundo. En la antigua India, los rubíes se consideraban símbolos de poder y protección, y se utilizaban en la fabricación de amuletos y talismanes.
Zafiro: El zafiro es otra variedad de corindón, y puede ser de color azul, rosa, amarillo, verde o incoloro. Los zafiros azules son los más conocidos y valorados, y se han utilizado en la joyería desde la antigüedad. En la antigua Persia, los zafiros se consideraban símbolos de sabiduría y poder, y se utilizaban en la fabricación de amuletos y talismanes.
Esmeralda: Desde la antigüedad, se ha valorado una piedra preciosa verde llamada berilo por su belleza y color, convirtiéndose en una de las gemas más valiosas después del diamante, rubí y zafiro, y utilizada en la joyería.
En la antigua Roma, las esmeraldas se consideraban símbolos de la fertilidad y se utilizaban en la fabricación de joyas y amuletos.
Topacio: El topacio es una piedra preciosa transparente o coloreada que puede ser amarilla, marrón, rosa, azul o verde. Los topacios se han utilizado en la joyería desde la antigüedad, y se consideraban símbolos de protección y curación. En la Edad Media, se creía que el topacio tenía poderes mágicos y podía proteger al usuario de los peligros y las enfermedades.
Ágata: El ágata es una variedad de cuarzo microcristalino que puede ser de muchos colores diferentes, como gris, azul, rosa, verde y rojo. Las ágatas se han utilizado en la joyería y la decoración desde la antigüedad, y se consideraban símbolos de protección y curación. En la Edad Media, se creía que las ágatas podían proteger al usuario de las enfermedades y el mal de ojo.
Lapislázuli: El lapislázuli es una piedra preciosa de color azul profundo que se encuentra en vetas en rocas de mármol. Desde la antigüedad, el lapislázuli ha sido utilizado en la joyería y la decoración, y fue muy valorado en Egipto por sus supuestos poderes mágicos y curativos. El lapislázuli también se ha utilizado en la pintura, ya que se puede moler en un pigmento de color azul intenso.
Turmalina: La turmalina es una piedra preciosa con una amplia gama de colores, incluyendo rosa, verde, azul y amarillo. Las turmalinas se han utilizado en la joyería y la decoración desde la antigüedad, y se consideraban símbolos de protección y curación. En el siglo XVIII, los exploradores holandeses trajeron turmalinas de Sri Lanka a Europa, donde se convirtieron en una de las piedras preciosas más populares para la joyería.
Amatista: La amatista es una variedad de cuarzo púrpura que se encuentra en todo el mundo. La amatista se ha utilizado en la joyería y la decoración desde la antigüedad, y se consideraba una piedra preciosa de protección y curación. En la Edad Media, se creía que la amatista tenía poderes mágicos y podía proteger al usuario de los peligros y las enfermedades.
Citrino: El citrino es una variedad de cuarzo amarillo o marrón que se encuentra en todo el mundo. El citrino se ha utilizado en la joyería desde la antigüedad, y se consideraba una piedra preciosa de protección y curación. En la Edad Media, se creía que el citrino tenía poderes mágicos y podía proteger al usuario de los peligros y las enfermedades.
Granate: El granate es una piedra preciosa que puede ser de muchos colores diferentes, como rojo, verde y amarillo. Los granates se han utilizado en la joyería desde la antigüedad, y se consideraban símbolos de protección y curación. En la Edad Media, se creía que los granates podían proteger al usuario de los peligros y las peligros
Perla: La perla es una piedra preciosa orgánica que se forma en el interior de las conchas de algunos moluscos, como las ostras. Las perlas han sido valoradas por su belleza y rareza desde tiempos antiguos, convirtiéndose en un elemento crucial en la joyería. En Persia antigua, se consideraban símbolos de riqueza y prosperidad, y se usaban para hacer joyas y objetos valiosos.
A lo largo de la historia y la gemología, se han valorado y apreciado muchas piedras preciosas, cada una con su propia historia, simbolismo y significado para diferentes culturas y sociedades. Algunas de las piedras más conocidas incluyen el diamante, el rubí, el zafiro, la esmeralda, el jade, el lapislázuli y muchas más.